martes, 25 de marzo de 2014

El día del “niño por nacer” se contrapone a la muerte del aborto

La primera celebración oficial en el mundo del “Día del Niño por Nacer” tuvo lugar el 25 de marzo de 1999 en Argentina. Desde ese año Argentina celebra el Día del Niño por Nacer.
La elección de la fecha recayó en esa fecha -según puntualiza el decreto 1406/98 que la instituyó- porque es la “fecha en que la Cristiandad celebra la Anunciación a la Virgen María” y se “conmemora el aniversario de la Encíclica Evangelium Vitae” .
Jesucristo, fue durante nueve meses un niño por nacer. Al hacerse hombre se unió de algún modo a todo hombre, y quiso identificarse con los más pequeños de sus hermanos: él padece hambre en los hambrientos, sed, frío, desnudez, exclusión, enfermedad y cárcel en todos los desheredados de la tierra. Él es de nuevo crucificado en cada niño por nacer al que se le niega el derecho a vivir, cualquiera sea el momento en que eso suceda.
Algunos países donde se ha instituido el Día del Niño por Nacer: Chile, Guatemala, Costa Rica, Nicaragua, República Dominicana, Perú, México, Cuba, Filipinas, Eslovaquia, Austria y Ecuador.
Este 25 de marzo festejamos con una nueva conquista el día del “niño por nacer”: la asignación de un subsidio especial desde el Gobierno Nacional para las mujeres gestantes reafirma una vez más la profunda opción del Pueblo argentino por la vida, protegida desde la concepción por nuestra Constitución Nacional.
En el mismo sentido cabe destacar el tratamiento especial de la problemática de la "Violencia Familiar" cuyo máximo y tristísimo paradigma lo constituye el aborto provocado, es decir la muerte provocada al hijo inocente, por la causa que sea.
Necesitamos un pueblo joven y fuerte para poblar de argentinos al extenso territorio patrio, y es esta una razón más que nos obliga a crear las condiciones para favorecer el aumento de la natalidad, asegurando desde ya una verdadera Justicia Social, bien entendida.